Ya instalados en el mes de noviembre, las temperaturas son cada día un poco más bajas. Tanto es así que en algunos lugares de España las calefacciones han empezado ya a funcionar.
El precio de la energía no para de subir durante los últimos meses. Y ya en pleno otoño, con el invierno cada vez más cerca, el importe de las facturas del gas y la electricidad son cada vez más altos.