En España está cada vez más al uso el fumar en cachimba. Estas pipas de agua conocidas también como narguile, shisha o hookah se han popularizado y es frecuente encontrarlas en locales ya que, a diferencia del tabaco, estas no se encuentran reguladas bajo la ley del tabaco. El precio de una shisha es variable y pueden llegar a costar cientos de euros como ocurre con las versiones de lujo que podemos encontrar en páginas como shishas El Badia.

¿Qué riesgos tiene fumar en shisha?

A diferencia del tabaco, las narguilas o shishas emplean un filtrado de agua para limpiar el humo que es inhalado. Ésto, sumado al compuesto húmedo que se quema lentamente al carbón y que en ocasiones está aromatizado con compuestos variados, da como resultado un humo espeso y un sabor dulce y agradable, en contraposición al tabaco. En sí mismo esto supone un riesgo ya que el agradable sabor y aroma, sumado al hecho de que la legislación anti-tabaco no excluye su consumo en los locales, da la falsa sensación de seguridad y de producto inocuo.

- De acuerdo a los estudios realizados, el fumar en cachimba es tan perjudicial o más que el del tabaco, teniendo en cuenta que la cantidad de humo aspirado es mayor y la concentración de monóxido de carbono es igual o superior al de un cigarro convencional. 

- Al igual que el tabaco, la inhalación del humo de la narguila supone la exposición a un gran número de sustancias cancerígenas y que pueden ser causantes de afecciones pulmonares como la bronquitis. 

- El fumar en narguila endurece las paredes arteriales y es factor de riesgo de los mismos accidentes cardiovasculares vinculados al consumo de tabaco.

- Aunque el sabor de la narguila sea agradable, el nivel de nicotina presente hace que presenten los mismos cuadros de acción que el tabaco convencional. 

- Un riesgo inherente a su forma de consumo es el de la transmisión de enfermedades como herpes, hepatitis o mononucleosis. Es importante que tanto si es de uso privado como en un local, emplear boquillas desechables individuales para minimizar el riesgo derivado de la inhalación desde la misma manguera.

- Salvo en el caso de las cachimbas electrónicas, la combustión del tabaco se realiza con una pastilla de carbón, que a su vez supone una fuente de substancias nocivas y potencialmente peligrosas.